El pasado miércoles 24 de agosto Big Time Rush se presentó en la Ciudad de México en el Palacio de los Deportes. Después de siete años sin realizar algún concierto, cinco años por su separación y dos por la pandemia, por fin llegó el tan esperado reencuentro, vimos nuevamente en el escenario a Kendall Schmidt, James Maslow, Logan Henderson y Carlos Pena como parte de su gira “Forever Tour”. Esta noche fue de ensueño para su fanaticada, revivieron varias emociones de infancias y adolescencias.
El concierto estuvo lleno de euforia, el cuarteto aún no iniciaba su presentación y sin embargo los gritos ya estaban sonando a tope retumbando en cada rincón del recinto. Llegó el momento de arrancar y la banda prendió los canticos con Windows Down, una rola de su álbum “Elevate” del año 2011, después sonó Music Sounds Better del mismo álbum. Para no hacer larga la espera, continuarían con Honey, una de sus nuevas canciones de este año 2022.
Los saltos, acrobacias y coreografías eran razón suficiente para que la agrupación empezara a despojarse de sus prendas, las chamarras ya no eran necesarias para el calor del momento; los brazos al descubierto eran una ventana para escuchar más gritos, movimiento que hacía cada integrante, grito que daba cada espectador. Es parte del show y de los artistas conservar la vibra a tope, pero es de reconocerse la vibra tan alta que mantiene cada “rusher” durante el concierto.
Era el momento de la primera sorpresa de la noche, el cantante dominicano Maffio llegó para cantar Dale Pa´Ya, yponer a bailar a todos con ese ritmo tan latino; la segunda sorpresa también la dio él, revelando que para el siguiente año saldrá un nuevo álbum de Big Time Rush con canciones en inglés y en español. Esperamos que esa propuesta sea todo un éxito y continúen estructurando grandes temas.
El momento mágico de la noche tenía que aparecer sí o sí; antes de comenzar la canción de Worldwide, la agrupación eligió a cuatro chicas para que se subieran al escenario, una de ellas subió junto a su novio sin esperarse una propuesta de matrimonio, el chico dijo lo siguiente: “por ellos nos conocimos, y ahora… ¿te quieres casar conmigo?” La chica respondió que sí y el público estalló nuevamente en gritos. El sueño de todo fanático lo lograron ellos.
Finalmente, las canciones encargadas de cerrar y encapsular este concierto tan especial fueron Big Time y Boy Friend; aunque no seas fan de estos muchachos de seguro has escuchado alguna de estas canciones, son dos de los temas más icónicos de la banda, desgarraron las gargantas de todos los asistentes. Carlos, Logan, Kendall y James terminaron sin camiseta para el cierre de este magno evento, situación de la cual evidentemente nadie metió queja alguna, todos admiraban sus esculturales cuerpos. Así como los artistas dejan el alma en el escenario, el fanatismo es todavía mayor, cada “rusher” explota toda su energía en Big Time Rush de principio a fin. Son esperados el próximo año o los que tengan que pasar.
Texto: Arath Azpeitia
Fotos: Ocesa
